Beatrice y Dante

¿Quién es Beatriz?

Beatrice fue la principal inspiradora de la Vita Nuova de Dante Alighieri y es comúnmente identificada con la Beatriz que aparece como una de sus guías en su obra maestra La Divina Commedia (La Divina Comedia).

¿Existió realmente Beatrice?

La vida de esta famosa mujer está rodeada de misterio.

Muchos historiadores han cuestionado si la guía que conduce a Dante a un paso de la contemplación de Dios en La Divina Comedia era la misma Beatrice Portinari que residía en Florencia.

Los estudiosos han debatido durante mucho tiempo si la Beatrice histórica pretende identificarse con alguna de las Beatrices que aparecen en los escritos de Dante o con ambas.

La tradición que identifica a Bice di Folco Portinari como la Beatrice amada por Dante es ahora ampliamente aceptada por los estudiosos, aunque no unánimemente.

Beatrice Portinari biografía

Beatrice era la hija de Folco Portinari, banquero y uno de los Priores de Florencia en 1282. Los Portinari, familia originaria de Fiesole, vivían en Florencia, cerca de la Casa de Dante, situada en el casco antiguo de Florencia; de hecho, actualmente se encuentra en la Via del Corso.
Folco Portinari tuvo seis hijas.
Beatrice estaba casada con un tal Simone de Bardi, uno de los hombres más influyentes de la ciudad. Murió tres años después del matrimonio, en 1290, con sólo veinticuatro años. Dado que las fechas y lugares de esta reconstrucción coinciden con lo que aporta Dante en su Vita Nova, se identifica a la muchacha con la famosa Beatrice.

El primero en referirse explícitamente a la joven fue Boccaccio en su comentario a La Divina Comedia.
Los documentos específicos sobre su vida siempre han sido escasos, lo que ha llevado a algunos a dudar de su existencia real. La única prueba fehaciente es el testamento de Folco Portinari, fechado en 1287, que dice «…item d. Bici filie sue et uxoris d. Simonis del Bardis reliquite …, lib.50 ad floren» -esencialmente un legado a su hija, casada con Simone dei Bardi.

Beatrice y Dante

Beatrice fue el verdadero amor de Dante. En su Vita Nova, Dante revela que vio a Beatrice por primera vez cuando su padre lo llevó a la casa de los Portinari para una fiesta de mayo. Eran niños: él tenía nueve años y ella ocho.
Dante quedó prendado al instante y nunca la olvidó después de este encuentro, aunque se casó con otra mujer, Gemma Donati, en 1285, con la que tuvo tres hijos y una hija.

Según la tradición, Dante y Beatrice también eran vecinos fuera de las murallas de Florencia, cerca de la colina de Fiesole, donde las familias Portinari y Alighieri tenían dos villas de verano vecinas. Es plausible que Dante y Beatrice se conocieran allí de niños.

Se reencontraría con ella nueve años después de forma inesperada: Beatrice paseaba vestida de blanco y acompañada por dos mujeres mayores por Lungarno (una de las calles de Florencia que bordean el río Arno).
Se volvió y le saludó. Dante recordaba bien el episodio, pero huyó sin decir una palabra.
Su saludo le llenó de tal alegría que se retiró a su habitación para pensar en ella. Al hacerlo, se quedó dormido y tuvo un sueño que se convertiría en el tema del primer soneto de La Vita Nuova.

Después, sólo hubo otros dos breves encuentros entre ambos: uno en la iglesia de Santa Margherita dei Cerchi (la iglesia que visitan Robert Langdon y Sienna Brooks en el Inferno de Dan Brown) y otro en una fiesta de bodas.
Las fiestas nupciales en la Toscana son muy populares hoy en día, pero podemos ver que eran igualmente interesantes en el pasado…

Influencia en la obra de Dante

La influencia de Beatriz estaba lejos de ser una simple inspiración. Apareció como personaje en sus dos mayores obras: La Vita Nuova y La Divina Comedia.

Tras la muerte de Beatriz, Dante se retiró a un intenso estudio y comenzó a componer poemas dedicados a su memoria. La colección de estos poemas, junto con otros que había escrito previamente en su diario en admiración a Beatriz, se convirtió en La Vita Nuova, una obra en prosa entrelazada con lírica.
Dante describe sus encuentros con ella, elogia su belleza y bondad, describe sus propias e intensas reacciones a su bondad o falta de ella, relata acontecimientos en la vida de ambos y explica la naturaleza de sus sentimientos por ella. La Vita Nuova también relata el día en que Dante fue informado de su muerte y contiene varios poemas angustiosos escritos después de ese acontecimiento. En el último capítulo, Dante promete no escribir nada más sobre Beatriz hasta que escriba «sobre ella lo que no se ha escrito antes de ninguna mujer»

La promesa se cumple en el poema épico La Divina Comedia, que compuso muchos años después. En ese poema expresa su amor exaltado y espiritual por Beatriz, que es su intercesora en el Infierno, su propósito al recorrer el Purgatorio y su guía en el Paradiso.

Beatrice se dirige a Dante, autor y personaje él mismo, por primera vez en el Canto 2 del Infierno de Dante: desciende al Limbo y reza para que el poeta Virgilio pueda rescatar a Dante. Luego reaparece en el Canto 30 del Purgatorio, cuando Virgilio desaparece.

Al verla por primera vez en el Purgatorio, éste se siente tan sobrecogido como a los nueve años y queda deslumbrado por su presencia a lo largo de todo el viaje hasta que ella asciende de nuevo a su lugar en el cielo, el punto más cercano a Dios que se le permite alcanzar.
Esta expresión de amor sublimado y espiritualizado termina con la absorción total de Dante en lo divino.
Su último encuentro se sitúa entre los bienaventurados del cielo al final de su viaje al más allá.

Si quieres saber más sobre Beatriz, te recomendamos La figura de Beatriz de Charles Williams.

Hoy sabemos que el amor de Dante por Beatriz era real. Ella representaba el ideal de belleza y gracia, pero también era una mujer real.
Beatrice se le apareció a Dante como la mujer/ángel que lo guía por el Paraíso, pero también siguió siendo una mujer real que hizo latir su corazón en las calles de Florencia.

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Este post fue publicado originalmente el 31 de julio de 2013, y ha sido actualizado y enriquecido el 14 de diciembre de 2016.

Imágenes de Wikipedia.