La vida de Keanu Reeves es más trágica de lo que crees

A primera vista, Keanu Reeves parece tenerlo todo. Muchos actores con talento sólo sueñan con alcanzar el nivel de fama y fortuna de Reeves, fruto del trabajo de una carrera como actor que se ha extendido durante tres décadas. Aunque su agente pensó que debía cambiarse el nombre cuando empezó a actuar, Reeves ha tenido mucho éxito utilizando el nombre que le dio su madre.

El actor canadiense tiene 97 créditos en su filmografía de IMDB, incluyendo un proyecto rumoreado y siete que aún no se han estrenado. La exitosa carrera de Reeves también ha sido bien pagada, convirtiendo a la estrella en uno de los actores más ricos de Hollywood. Sin embargo, las apariencias engañan. La historia de la vida personal de Reeves es desgarradoramente triste. Desde los 3 años, Reeves ha sufrido una tragedia tras otra.

El padre de Keanu Reeves abandonó a su familia

Reeves nació en Beirut, Líbano, hijo de la corista y diseñadora de vestuario Patricia Taylor y del geólogo Samuel Reeves. Cuando Reeves tenía sólo 3 años, Samuel abandonó a la familia. Patricia, que era madre soltera, trasladó a la familia de un lado a otro durante la infancia de Reeves, criándolo en Hawai, Australia, Nueva York y Canadá. Reeves asistió a cuatro escuelas secundarias cuando abandonó los estudios a los 17 años. Reconoce que su lucha contra la dislexia hizo que su educación fuera un reto mayor de lo que es para la mayoría de la gente.

River Phoenix era el mejor amigo de Keanu Reeves

El actor River Phoenix estaba considerado como uno de los actores más dotados de su tiempo. Su trabajo en películas como Stand by Me y River’s Edge fue universalmente alabado por la crítica. Phoenix y Reeves se conocieron en la película I Love You to Death y rápidamente se hicieron mejores amigos. Cuando Reeves vio el guión de My Own Private Idaho, supo que Phoenix era perfecto para el papel. En diciembre de 1989, Reeves recorrió más de 1.000 millas en su motocicleta para entregar el tratamiento de la película a Phoenix y convencerle de que aceptara el papel. Fue durante el rodaje de My Own Private Idaho cuando Phoenix desarrolló una adicción a las drogas que más tarde se cobraría su vida.

En 1993, Phoenix murió de una sobredosis de drogas a las afueras del famoso punto de encuentro de los famosos, Viper Room, cuando tenía 23 años. Al parecer, el actor tomó una combinación letal de cocaína, heroína y Valium. Reeves también tenía 23 años en ese momento.

La muerte de la hija y la novia de Keanu Reeves

Sólo cinco años después de la muerte de su mejor amigo, Reeves conoció a la asistente de David Lynch, Jennifer Syme, en 1998. La pareja «se enamoró al instante», según Reeves, y concibió un hijo un año después. El 24 de diciembre de 1999, mientras Reeves rodaba Matrix, Ava Archer Symes-Reeves nació muerta. El dolor por la pérdida de un hijo, comprensiblemente, tensó su relación y la pareja rompió unas semanas después. Por desgracia, la trágica historia no termina ahí. Un año y medio después, Syme volvía a una fiesta en casa de Marilyn Manson cuando murió en un accidente de coche. Sólo tenía 28 años en el momento de su muerte, el 2 de abril de 2001.

Reeves abordó su interminable dolor en una entrevista de 2006. «El dolor cambia de forma, pero nunca termina», dijo Reeves a Parade. «La gente tiene la idea errónea de que puedes lidiar con él y decir: ‘Se ha ido y estoy mejor’. Se equivocan. Cuando la gente que quieres se ha ido, estás solo». Reeves ha citado las muertes de Ava y Symes como la razón por la que evita las relaciones serias y tener hijos.

La tragedia no ha amargado a Keanu Reeves

Winona Ryder (I) y Keanu Reeves | Kevin Winter/Getty Images

La historia de la vida de Reeves es indiscutiblemente triste, pero también es inspiradora. Cualquiera de los acontecimientos mencionados es suficiente para amargar a casi cualquier persona, pero Reeves parece que sólo ha ganado más compasión y empatía en el camino. A pesar de todo el dolor y la desgracia que ha soportado, Reeves se ha hecho tan conocido por sus actos de bondad al azar como por sus películas.

Aunque a Reeves no le gusta hablar de su doloroso pasado, tiende a retratar a personajes que han soportado dificultades similares en la vida. En John Wick, el personaje de Reeves es un asesino motivado por la pérdida de su mujer y su perro. Reeves declaró a The Telegraph que el dolor de Wick le permitió conectar con el personaje. «Para mí, fue el dolor de John lo que lo hizo personal», dice Reeves. «Era lo suficientemente fuerte como para que quisiera desenterrar su pasado. No lo vi como una venganza, sino como una reivindicación».

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