Vivir con dolor de espalda y cuello puede impedirle disfrutar plenamente y comprometerse con la vida. Por desgracia, no siempre hay una respuesta fácil para el alivio del dolor de espalda. Lo que funciona para una persona puede no ayudar a otra. Mientras que algunas personas responden a tratamientos como los analgésicos de venta libre o la fisioterapia, otras pueden necesitar soluciones diferentes para tratar su dolor.
Es importante conocer todas sus opciones cuando busque tratamiento para el dolor de espalda crónico. En particular, la electroterapia puede ser una opción eficaz para el tratamiento del dolor.
¿Pero qué es la electroterapia? ¿Duele? Y, ¿tengo que ir a la consulta del médico o puedo hacerla en casa? Utilice esta guía para responder a estas preguntas y otras más sobre cómo la electroterapia no invasiva puede ayudarle.
¿Qué es la electroterapia?
La electroterapia es un término general para el uso de pulsos eléctricos suaves para disminuir el dolor en una zona del cuerpo. Normalmente, todas estas terapias utilizan un dispositivo con electrodos para suministrar una corriente eléctrica de bajo voltaje a las zonas problemáticas.
Uno de los principales objetivos de la electroterapia es el control del dolor. El uso de la electricidad también puede ayudar a mejorar la circulación, lo que a su vez activa el proceso de curación del cuerpo. Esto puede ayudar a fortalecer los músculos, estimular el crecimiento de los huesos y reparar los tejidos dañados. Además, la electroterapia puede aumentar el movimiento y la función en una zona afectada o rígida. Por ejemplo, el médico puede recetar la electroterapia como tratamiento alternativo para la rigidez del cuello.
Pero, ¿no causaría más dolor el hecho de recibir descargas eléctricas? Dado que se trata de corrientes eléctricas de bajo voltaje, la persona sólo suele sentir una sensación de hormigueo o zumbido. Algunas personas incluso consideran que el uso de estas máquinas es relajante.
Mejor aún, los efectos secundarios de la electroterapia, si los hay, suelen ser leves. El efecto secundario más común que los pacientes señalan es la irritación de la piel causada por el adhesivo de los electrodos. Algunas personas también pueden experimentar náuseas o desmayos. Y, si no se utiliza el dispositivo correctamente, puede producirse una sensación de quemazón en la superficie de la piel.
Una de las principales ventajas de la electroterapia es su carácter alternativo. Como probablemente sepa, algunos medicamentos narcóticos para el dolor pueden tener efectos secundarios peligrosos y pueden crear hábito. Reducir el uso de estos fármacos -especialmente si tiene un historial de abuso de sustancias- puede conducir a menos problemas de dependencia en el futuro.
¿Qué afecciones articulares de la columna vertebral puede tratar la electroterapia?
La electroterapia ha mostrado resultados prometedores para quienes sufren trastornos musculoesqueléticos que causan dolor de cuello y espalda. Además, esta forma de terapia puede ayudar con ciertos tipos de dolor nervioso. Algunas condiciones tratadas con electroterapia incluyen:
- Síntomas de fibromialgia
- Dolor por osteoporosis
- Neuropatía diabética
- Fatiga crónica
- Promover el crecimiento óseo después de un procedimiento como una fusión espinal
- Curación de heridas
- Dolor de espalda y cuello agudo o crónico
- Traumatismo
- Dolor relacionado con el cáncerLa electroterapia ha ayudado a muchas personas con afecciones como éstas y otras más. Sin embargo, a veces los pacientes no responden al tratamiento. Experimentar con la colocación de los electrodos y la forma de administrar la corriente puede aumentar el éxito. Además, es mejor combinar esta terapia con otros tratamientos como la fisioterapia, los ejercicios para el dolor de espalda o la ciática, o los tratamientos de bloqueo nervioso.
Aunque la electroterapia es segura para la mayoría de la gente, las personas con ciertas condiciones de salud deben evitarla. Las personas con marcapasos pueden sufrir una peligrosa arritmia cardíaca (latidos irregulares) cuando los electrodos se colocan cerca del corazón. Además, el uso de un dispositivo durante el embarazo podría causar daños al feto. Las personas con ciertas afecciones neurológicas también deben consultar con un médico antes de iniciar este tratamiento. Además, la electroterapia no está recomendada para las personas con problemas cognitivos como la demencia o el Alzheimer.
Tipos de tratamientos de electroterapia
El tratamiento de electroterapia que elija depende del origen y la gravedad de su dolor. Se aconseja que hable con su médico u otro profesional de la salud antes de comenzar cualquiera de estos tratamientos.
En muchos casos, un fisioterapeuta o quiropráctico para el dolor de espalda probará los dispositivos y cómo le afectan durante una visita al consultorio. Si el tratamiento parece ser útil, podría incluso utilizarlo en casa. El precio de los dispositivos de electroterapia oscila entre los 20 dólares y los cientos de dólares. Si el tratamiento es prescrito por un médico, el seguro puede pagar una parte o la totalidad del coste.
Estos son algunos de los tipos comunes de electroterapia que su médico puede recomendar:
Estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS)
Uno de los dispositivos de electroterapia más comunes se asemeja a un DEA (similar a las máquinas que se utilizan para reanimar a los pacientes en caso de paro cardíaco). Se colocan pequeñas almohadillas adhesivas con electrodos sobre o cerca de la zona donde se siente el dolor. (Su médico o fisioterapeuta le ayudará a determinar la mejor zona de colocación de estas almohadillas). A continuación, la unidad que funciona con pilas envía una serie de corrientes eléctricas de bajo voltaje a la zona. Un controlador le permitirá aumentar o disminuir la corriente eléctrica, así como la frecuencia y los patrones de estimulación.
Existen algunas especulaciones sobre el funcionamiento de la TENS. En general se acepta que una unidad TENS ayuda a bloquear o anular las señales de dolor de los nervios al cerebro. La alteración de estos receptores del dolor puede proporcionar un alivio temporal del mismo. Además, la TENS puede mejorar la circulación y reducir los espasmos musculares en la zona lumbar.
Algunos tratamientos con TENS sólo duran media hora. En otros casos, puede utilizar el dispositivo TENS durante varias horas seguidas, incluso mientras duerme la siesta. Es posible que desee llevar un diario de sus niveles de dolor, los ajustes que utiliza y cualquier otro síntoma que pueda aparecer y desaparecer. Esto les permitirá a usted y a su médico solucionar los problemas y encontrar los mejores ajustes para aliviar el dolor.
Estimulación nerviosa eléctrica percutánea (PENS)
Una alternativa a la TENS, la estimulación nerviosa eléctrica percutánea (PENS) utiliza agujas en lugar de almohadillas para suministrar corrientes eléctricas. Considérelo como acupuntura con estimulación eléctrica. La ventaja de utilizar agujas en lugar de almohadillas es que las corrientes pulsan más cerca de los nervios y músculos pinzados. Esto puede proporcionar un alivio del dolor casi inmediato para algunos pacientes.
Este tipo de terapia se utiliza generalmente en un entorno de terapia física o de atención médica como un procedimiento ambulatorio. En algunos casos, también puede utilizar un dispositivo PENS en casa.
Estimulación muscular eléctrica (EMS)
Si el origen de su dolor se debe a problemas musculares, la estimulación muscular eléctrica (EMS) puede ser una opción. Similar a un dispositivo TENS, la EMS utiliza electrodos para suministrar corrientes a los músculos en lugar de a los nervios.
El objetivo final de la EMS es ayudar a reconstruir el tejido muscular. Cuando una corriente eléctrica estimula un músculo, éste se contrae. A diferencia del ejercicio típico, la EMS ayuda a contraer más fibras musculares para mejorar su fuerza. Piense en ello como un entrenamiento supercargado.
La EMS es especialmente útil cuando los músculos se han debilitado. Esto incluye cuando un atleta sufre una lesión muscular o después de una lesión o cuando una parte del cuerpo ha estado inmovilizada durante un período de tiempo.
Terapia de Campo Electromagnético Impulsado (PEMF)
PEMF adopta un enfoque diferente al uso de la electricidad para el alivio del dolor. En lugar de tratar los nervios o los músculos, la PEMF trata de curar a nivel celular. Durante el tratamiento, unas bobinas especializadas crean un campo electromagnético alrededor de una parte o de todo el cuerpo. Estas ondas electromagnéticas estimulan los electrones de las células, ayudando al proceso de curación y estimulando el crecimiento de los huesos.
Piénselo de esta manera: Sus células y sus electrones pierden energía debido a la edad, la enfermedad o las lesiones. Los tratamientos de PEMF pueden revivir las células y hacerlas más eficaces en la curación, la reconstrucción y la lucha contra la enfermedad.
Hay varios estilos y tamaños diferentes de un dispositivo de PEMF. El dispositivo más común se asemeja a una gruesa esterilla de yoga con un controlador conectado. El tratamiento suele realizarse en la consulta de un terapeuta. Sin embargo, se pueden adquirir otros productos de PEMF para uso doméstico.
Como puede ver, hay muchas opciones a la hora de explorar los beneficios de la electroterapia. El primer paso consiste en encontrar un equipo de profesionales versados en tratamientos de vanguardia para el dolor de espalda.
Encontrar el mejor tratamiento de electroterapia
Entonces, ¿qué técnica de electroterapia es la mejor para usted? Aunque hay varios factores a tener en cuenta, la elección del tratamiento adecuado podría marcar la diferencia entre vivir con dolor y recuperar su vida. El Advanced Spine Center puede ayudarle a examinar sus opciones y descubrir el tratamiento más adecuado para usted.
Desde el diagnóstico adecuado de su dolor hasta la elección de los tratamientos más adecuados, nuestro equipo especializado del Advanced Spine Center está preparado para ayudarle. Para recibir un tratamiento personalizado de los mejores médicos ortopédicos de Nueva Jersey, programe una consulta hoy mismo y descubra cómo puede volver a la vida sin dolor.