TMD (trastorno temporomandibular)

Las articulaciones de la mandíbula y los grupos de músculos que nos permiten masticar, tragar, hablar y bostezar se conocen como temporomandibulares. Cuando hay un problema con el funcionamiento de las articulaciones y los músculos, puede tener un trastorno temporomandibular o TTM.

Síntomas

Los síntomas de los TTM son:

  • Músculos de la mandíbula sensibles o doloridos. La mandíbula puede doler aún más al despertarse, apretar los dientes, masticar la comida o bostezar.
  • Problemas para abrir o cerrar la boca. Puede ser difícil abrir o cerrar las mandíbulas por completo, o sus mandíbulas pueden bloquearse al abrirse o cerrarse.
  • Dolores de cabeza que no puede explicar. También puede sentir dolor en el cuello. Estos pueden ser causados por el TTM, o por otros problemas. Dígale a su dentista Y a su médico.
  • un ruido de chasquido o rechinamiento cuando mastica o bosteza. Es posible que oiga ruidos extraños en las articulaciones de la mandíbula, como chasquidos o estallidos al abrir la boca, o sonidos de crujido y rechinamiento al masticar.

Causa y efecto

La causa del TTM no siempre está clara, pero en la mayoría de los casos el estrés es un factor importante. Estas son algunas de las cosas que PUEDEN causarlo:

  • Apretar y rechinar los dientes. Apretar los músculos de la mandíbula puede hacer que le duelan. Algunas personas rechinan los dientes o aprietan los músculos de la mandíbula cuando están bajo estrés.
  • Lesión en la cara o los maxilares. Las mandíbulas rotas (o fracturadas), una articulación de la mandíbula que ha sido golpeada fuera de su lugar (o dislocada) y el «latigazo» pueden causar TTM.
  • Algunas enfermedades, como la artritis reumatoide, pueden afectar a las articulaciones y los músculos de la mandíbula.
  • Si su mandíbula no crece de la manera correcta, sus dientes pueden no estar alineados como deberían. Esto puede dificultar la mordida y la masticación, y puede provocar un TTM.

Otras cosas que PUEDEN provocar un TTM son:

  • dientes desgastados, sueltos o ausentes
  • problemas en las encías
  • dentaduras parciales o completas que no se ajustan bien
  • hábitos como morder el bolígrafo o el lápiz

Lo que puede hacer

1. Relajarse. Sea consciente de cuándo está apretando los dientes. Intente relajar los músculos de la mandíbula y mantenerlos relajados. Si necesita ayuda para aprender a relajarse, hay cursos que pueden enseñarle. Pregunte a su dentista o médico.

2. Vigile lo que come. Evite los alimentos duros o pegajosos. No mastique chicle. Lleve una dieta blanda y corte los alimentos en trozos pequeños. Intente no abrir demasiado la boca, incluso cuando bostece.

3. Masaje y ejercicio. Frote (o masajee) y estire (o ejercite) los músculos de la mandíbula. Esto puede ayudar a aliviar el estrés, al igual que lo hace con otros músculos de su cuerpo. Pero sea suave. Demasiados estiramientos o ejercicios podrían empeorar el problema.

4. Utilice una compresa. Su dentista puede sugerirle que se ponga una compresa fría o caliente en los músculos de la mandíbula doloridos, y que luego los frote (o masajee) suavemente para ayudar a aliviar los músculos tensos. Para una compresa fría, utiliza cubitos de hielo envueltos en una toalla o una bolsa de verduras congeladas, como los guisantes. Para una compresa caliente, utilice una bolsa de agua caliente o una almohadilla térmica envuelta en una toalla, o un paño caliente y húmedo.

5. Recuerde el dicho: «Labios juntos… dientes separados». Cuando esté relajado:

  • sus dientes deben estar ligeramente separados,
  • su lengua debe descansar suavemente contra el paladar y
  • sus labios deben estar relajados y apenas tocándose o ligeramente separados.

Intente mantener los dientes superiores e inferiores separados, excepto cuando esté comiendo o tragando.

6. Piense en positivo. Casi todos los pacientes con TTM mejoran, pero no hay una «cura fácil». Para algunos pacientes, una vez que saben que aprietan la mandíbula, hacen un esfuerzo por relajarse. Pueden aliviar sus síntomas en unos días o semanas. Para otros, pueden pasar varias semanas o varios meses antes de que se sientan mejor.

Cómo puede ayudar su dentista

Para juzgar su estado, su dentista:

  • le hará un examen detallado y
  • puede tomar radiografías.

Dependiendo de lo que encuentre su dentista, puede sugerir un plan para tratar su TTM. Su dentista también puede remitirle a un especialista dental con formación adicional en TTM. Puede ser un cirujano oral (también llamado cirujano oral y maxilofacial), un patólogo oral, un ortodoncista, un periodoncista o un prostodoncista. Si su dentista le remite a un especialista en odontología, le explicará lo que hace dicho especialista.

El tratamiento puede incluir:

  • remitirle a otro trabajador sanitario para que le ayude a aliviar el dolor muscular o a abrir la mandíbula. Podría ser un fisioterapeuta, un quiropráctico y/o un terapeuta conductual.
  • Corregir problemas con sus dientes. Si usted tiene una mala mordida, los aparatos u otro trabajo dental puede ser utilizado para corregir el problema. Los dientes que están causando el problema a veces pueden ser reformados para que encajen mejor.
  • tomar medicamentos. Dependiendo de la causa del TTM, los medicamentos para el dolor, la inflamación, los músculos tensos o la depresión pueden ayudar.
  • Usar un protector nocturno o una placa de mordida (también llamada férula oclusal). Una férula oclusal está hecha de plástico transparente. Se coloca sobre la superficie de mordida de los dientes de una de las mandíbulas para que usted muerda contra la férula y no contra sus dientes. Esto ayuda a que las articulaciones y los músculos de la mandíbula se relajen. Dependiendo de su TTM, su dentista puede indicarle que lleve una férula las 24 horas del día, sólo por la noche o durante un tiempo intermedio.
  • Se somete a una cirugía. Si ninguno de los otros tratamientos ha funcionado, o si es MUY difícil abrir la mandíbula, es posible que necesite cirugía.

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