Qué causa un bulto doloroso en la espalda y cómo tratar sus síntomas

6 causas de bulto doloroso en la espalda

Los siguientes detalles pueden ayudarle a entender mejor sus síntomas. La mayoría de las causas de los bultos dolorosos en la espalda pueden tratarse después de que un médico determine un diagnóstico adecuado, que puede requerir una biopsia.

Causas inflamatorias

Las condiciones inflamatorias desencadenan la respuesta inmune natural del cuerpo.

  • Infecciones: La piel alberga muchos patógenos bacterianos diferentes y es susceptible de sufrir infecciones por cortes o lesiones. Las infecciones graves pueden formar quistes llenos de líquido o abscesos llenos de pus que provocan una obstrucción y la consiguiente hinchazón. Además, cuando los folículos pilosos se infectan por bacterias u hongos, pueden inflamarse y convertirse en pequeñas protuberancias rojas o granos que pueden crecer e hincharse sin tratamiento. Este tipo específico de infección se conoce como foliculitis y puede estar causada por muchas bacterias, hongos y virus diferentes.
  • Dermatológicas: Hay muchas afecciones dermatológicas que pueden dar lugar a uno o varios bultos dolorosos en la espalda. Las afecciones cutáneas como el eczema o el acné pueden causar inflamación en la espalda. Los bultos más profundos, llamados forúnculos, pueden unirse para formar grupos conocidos como carbuncos. Esta inflamación dermatológica puede causar múltiples protuberancias que dan lugar a un picor excesivo, sensibilidad y dolor.
  • Reumatológico: Los quistes son sacos que pueden estar llenos de líquido, aire u otro material y pueden formarse en cualquier parte del cuerpo.

Causas traumáticas

Las causas traumáticas de los bultos dolorosos en la espalda se asocian a lesiones en la espalda.

  • Directas: Los traumatismos en la espalda, tanto por sucesos menores como graves, pueden dar lugar a bultos dolorosos en la espalda. Las causas traumáticas también pueden asociarse a deformidades visibles y hemorragias, dependiendo de la gravedad del traumatismo.
  • Repetitivo: La espalda es susceptible de sufrir lesiones por movimientos repetitivos que pueden causar pequeñas lesiones pero que dan lugar a un dolor importante. Los problemas mecánicos o anatómicos dentro de la espalda, y la forma en que interactúa con otras articulaciones, pueden dar lugar a una irritación o a un bulto doloroso.

Golpes

Un bulto en la espalda suele ser el resultado del crecimiento de estructuras subyacentes en la espalda, que pueden ser benignas (no cancerosas) o malignas (cancerosas). Estos bultos no suelen estar asociados a dolor; sin embargo, éste puede ser un síntoma de presentación. Hay varias estructuras específicas dentro de la espalda, incluyendo las siguientes.

  • Nervios: La espalda alberga la médula espinal, la estructura de soporte central del cuerpo y el centro de transmisión de los mensajes que van y vienen del cuerpo y del cerebro. Los nervios que surgen de la columna vertebral proporcionan sensación y permiten el movimiento de diferentes partes del cuerpo.
  • Músculos: Hay muchos músculos en la espalda, tanto superficiales como profundos. Estos músculos permiten doblarse, ponerse de pie, girar y levantar objetos. Los músculos extensores ayudan a mantener el cuerpo erguido, los músculos flexores le ayudan a doblarse y los músculos oblicuos le ayudan a girar.
  • Grasa: Hay una capa de tejido graso debajo de la piel que almacena energía, regula la temperatura del cuerpo y sirve como cojín protector. Los crecimientos de la grasa y el tejido blando de la piel se conocen como lipomas y suelen presentarse como nódulos blandos, redondos e indoloros. Suelen aparecer en la espalda y las extremidades superiores, pero pueden aparecer en otras localizaciones.
  • Linfáticos: El sistema linfático ayuda a eliminar los desechos y las toxinas del cuerpo. Incluye una red de tejidos y estructuras tanto en el cuerpo como debajo de la piel, como los ganglios linfáticos, que desempeñan un papel importante en la lucha contra las infecciones.
  • Piel: Puede parecer obvio, pero la piel es un órgano importante para todo el cuerpo y suele ser la etiología más común de bultos y protuberancias en la piel.

Absceso cutáneo

Un absceso cutáneo es una gran bolsa de pus que se ha formado justo debajo de la piel. La causa es que las bacterias se introducen bajo la piel, normalmente a través de un pequeño corte o arañazo, y comienzan a multiplicarse. El cuerpo combate la invasión con glóbulos blancos, que matan parte del tejido infectado pero forman pus dentro de la cavidad que queda.

Los síntomas incluyen un bulto grande, rojo, hinchado y doloroso de pus en cualquier parte del cuerpo bajo la piel. Puede haber fiebre, escalofríos y dolores corporales a causa de la infección.

Si no se trata, existe el riesgo de que el absceso aumente de tamaño, se extienda y provoque una enfermedad grave.

El diagnóstico se realiza mediante un examen físico.

Un pequeño absceso puede curarse por sí solo, a través del sistema inmunitario del cuerpo. Pero algunos necesitarán ser drenados o lanceados en la consulta del médico para poder limpiar el pus. Suelen recetarse antibióticos.

Mantener la piel limpia, y usar sólo ropa y toallas limpias, ayudará a que el absceso no vuelva a aparecer.

Rareza: Común

Síntomas principales: sarpullido con protuberancias o ampollas, sarpullido rojo, protuberancia roja en la piel de más de 1/2 cm de diámetro, sarpullido lleno de pus, sarpullido

Síntomas que siempre aparecen con el absceso cutáneo: sarpullido con protuberancias o ampollas

Urgencia: Médico de atención primaria

Espinillas

Las espinillas también se llaman comedones, manchas, granos o «granos». Médicamente, son pequeñas erupciones cutáneas llenas de grasa, células cutáneas muertas y bacterias.

Los granos suelen empezar a aparecer en la pubertad, cuando las hormonas aumentan la producción de grasa en la piel y a veces obstruyen los poros.

Los más susceptibles son los adolescentes de entre 13 y 17 años aproximadamente.

Los síntomas incluyen poros obstruidos que pueden parecer planos y negros en la superficie, porque la grasa se oscurece cuando se expone al aire; poros obstruidos que parecen blancos en la superficie porque se han cerrado con células cutáneas muertas; o ampollas hinchadas, de color blanco amarillento, llenas de pus y rodeadas de piel enrojecida.

Los brotes de granos en la piel pueden interferir en la calidad de vida, haciendo que la persona se sienta acomplejada por su aspecto y causando dolor y molestias en la piel. Un médico puede ayudar a controlar la afección, a veces mediante la derivación a un dermatólogo.

El diagnóstico se realiza mediante un examen físico.

El tratamiento consiste en mejorar la dieta; mantener la piel, el cabello, los paños y las toallas muy limpios; y utilizar remedios para el acné de venta libre.

Rareza: Común

Síntomas principales: bulto facial rosado o rojo, bulto facial pequeño, bulto facial doloroso, bulto facial del tamaño de una canica

Síntomas que aparecen siempre con el grano: bulto facial rosado o rojo

Urgencia: Autotratamiento

Furgo (forúnculo)

Un forúnculo, también llamado furúnculo, es la infección de un folículo piloso. La infección se forma bajo la piel en la raíz del pelo y puede producirse en cualquier parte del cuerpo.

La infección está causada por bacterias, la mayoría de las veces Staphylococcus aureus o «estafilococo». La irritación causada por la ropa o cualquier otra cosa que roce la piel puede hacer que ésta se rompa y permita la entrada de las bacterias.

Las bacterias estafilocócicas se encuentran en todas partes. Lavarse las manos con frecuencia y minuciosamente, y mantener la limpieza de otro modo, ayudará a evitar su propagación.

Las personas más susceptibles son las que tienen un sistema inmunitario debilitado; la diabetes; y otras infecciones cutáneas.

Los síntomas incluyen un único bulto bajo la piel que está hinchado, es doloroso y rojo, y contiene pus.

Es importante tratar el forúnculo, ya que la infección puede extenderse al torrente sanguíneo y viajar por todo el cuerpo.

El diagnóstico se realiza mediante un examen físico y, a veces, con una muestra de líquido del forúnculo.

El tratamiento puede implicar la incisión y el drenaje de la infección, seguido de cremas para aplicar en el lugar del forúnculo y/o un curso de medicamentos antibióticos.

Rareza: Poco frecuente

Síntomas principales: bulto facial rosado o rojo, bulto facial pequeño, bulto facial doloroso, bulto facial del tamaño de una canica, cambios constantes en la piel

Síntomas que siempre se presentan con el forúnculo (furúnculo): bulto facial rosado o rojo

Síntomas que nunca se presentan con el forúnculo (furúnculo): fiebre

Urgencia: Autotratamiento

Absceso cutáneo grave

Un absceso cutáneo es una infección de la piel más profunda que suele deberse a bacterias observadas en la piel. Recientemente, las infecciones son más frecuentemente causadas por Staph. Aureus (pone el «estafilococo» en «infecciones por estafilococo»). Si la infección comienza a extenderse, se requiere un tratamiento urgente.

Rareza: Rara

Síntomas principales: fatiga, fiebre, bulto doloroso en el cuello, bulto del tamaño de una canica en el cuello, bulto rosado o rojo en el cuello

Síntomas que se presentan siempre con el absceso cutáneo grave: bulto rosado o rojo en el cuello, bulto rojo

Urgencia: Urgencias hospitalarias

Dermatofibroma

Un dermatofibroma es un crecimiento cutáneo común que suele aparecer en la parte inferior de las piernas, pero puede aparecer en cualquier parte del cuerpo. Estos crecimientos son benignos (no cancerosos). Los dermatofibromas son más comunes en los adultos y rara vez se encuentran en los niños.

Los síntomas incluyen un crecimiento duro y elevado que es de color rojo, rosa, …

Lipoma

Lipoma es una palabra que se traduce como «tumor graso», pero un lipoma no es cáncer. Se trata simplemente de un crecimiento de grasa entre la capa muscular y la piel que hay sobre ella.

Se desconoce la causa exacta. La afección se da en familias y se asocia a otros síndromes inusuales como la adiposis dolorosa, que es similar. Los lipomas suelen aparecer después de los 40 años.

Los síntomas incluyen un bulto blando y fácil de mover bajo la piel, de unos cinco centímetros de diámetro. Un lipoma es indoloro, a menos que su crecimiento irrite los nervios que lo rodean. La mayoría de las veces se encuentran en la espalda, el cuello y el abdomen, y a veces en los brazos y la parte superior de las piernas.

Es una buena idea que un médico revise cualquier crecimiento nuevo o inusual, para asegurarse de que es benigno.

El diagnóstico se realiza mediante un examen físico, una biopsia y pruebas de imagen como la ecografía o la tomografía computarizada.

La mayoría de las veces, el tratamiento no es necesario a menos que el lipoma sea antiestético o esté interfiriendo con otras estructuras. Se puede eliminar mediante cirugía o liposucción.

Rareza: Poco frecuente

Síntomas principales: bulto inguinal del color de la piel, bulto inguinal del tamaño de una canica, bulto inguinal pequeño

Síntomas que se presentan siempre con el lipoma: bulto inguinal del color de la piel

Urgencia: Esperar y observar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.