Durante el día, las langostas del Caribe permanecen ocultas en cuevas, bajo salientes y en grietas de la superficie del arrecife. Durante el crepúsculo y la noche, los individuos son mucho más activos y buscan en el arrecife pequeños caracoles y cangrejos, materia orgánica en descomposición y algunas plantas. Las langostas del Caribe comen casi todo lo que encuentran. A diferencia de la famosa langosta de Maine, las langostas del Caribe no tienen pinzas delanteras agrandadas y son inofensivas para las personas. Aun así, si un buceador o un buceador con tubo se agarra a una sin guantes, las afiladas espinas que cubren la cabeza y el cuerpo pueden cortarle la mano.
Como en todos los decápodos, el caparazón de la langosta del Caribe es realmente un esqueleto en el exterior de su cuerpo. El exoesqueleto no se expande y, por lo tanto, la langosta debe mudar (o desprenderse) regularmente para crecer. Antes de la muda, el individuo comienza a construir un nuevo esqueleto más grande dentro del existente. Cuando se hace demasiado grande para ser contenido, abre el caparazón exterior y el nuevo exoesqueleto se endurece. Durante este proceso, el nuevo exoesqueleto puede estar blando durante varias horas, y la langosta es muy vulnerable a la depredación.
Las poblaciones de langosta del Caribe están disminuyendo en toda su área de distribución y se han agotado en su mayor parte en algunas zonas, pero los científicos no tienen suficiente información para entender si son o no vulnerables a la extinción. Son muy codiciadas por su carne y son una de las especies más valiosas del Caribe. Por esta razón, son vulnerables a la sobrepesca. Los pescadores de toda su área de distribución capturan las langostas del Caribe buceando a pulmón o con el buceo para capturarlas a mano o colocando numerosas trampas con cebo. Con estos métodos, un equipo de pescadores puede capturar casi todos los individuos de una zona. Esta especie se captura mediante una pesquería gestionada en toda su área de distribución. La mayoría de los países en los que se pesca la langosta del Caribe definen las normas sobre la época del año y el lugar en el que se puede y no se puede capturar. Lamentablemente, la pesca furtiva y otras formas de pesca ilegal, además de las regulaciones pesqueras que no se basan en los mejores datos científicos, amenazan a esta especie, y es probable que las poblaciones sigan disminuyendo. Junto con la concha reina, la langosta del Caribe es uno de los productos de exportación más valiosos para los pequeños países caribeños, y un colapso de esta pesquería amenazaría las economías costeras de muchos lugares.
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