Como generación obsesionada con las aplicaciones de citas, no es de extrañar que muchos de nosotros consideremos que la atracción física que sentimos por alguien es uno de los indicadores clave para saber si debemos tener una relación con él. Pero, ¿hasta qué punto es importante sentirse atraído físicamente por la pareja desde el principio? Simone Bose, asesora de relaciones de Relate, dice que «la atracción crece» y que sentir esa punzada inicial de atracción no significa que vayas a ser compatible a largo plazo.
Las mujeres que mantienen relaciones con personas por las que no se sentían inicialmente atraídas están compartiendo sus experiencias en AskWomen de Reddit. Y parece que todas están muy contentas con sus parejas…
1. «No lo encontré atractivo cuando empezamos a salir, pero tampoco lo encontré poco atractivo. Había una fuerte química emocional entre nosotros que me parecía atractiva. Cuanto más tiempo llevamos juntos, más atractivo físicamente empiezo a encontrarlo. Personalmente creo que cualquier química emocional que tengáis entre vosotros triunfará sobre la atracción física a largo plazo. Además, la apariencia física cambiará mientras que tu atracción emocional hacia la persona probablemente no lo hará».
2. «Al principio pensaba que era decente, pero me hacía reír y podíamos hablar durante horas. Ahora creo que mi prometido es más guapo cada día».
3. «No me sentía súper atraída por mi pareja a través de las fotos que había visto antes de conocerlo, pero tampoco me sentía poco atraída. Nos citaron a través de un amigo y desde el momento en que lo conocí hubo una buena chispa. En cierto modo es curioso porque el «tipo» que tengo en mi cabeza de lo que me gusta es completamente opuesto a lo que realmente me gusta (que es él a la perfección). Ahora encuentro muchas cosas atractivas en mi pareja, tanto física como emocionalmente. Es el mejor hombre que he conocido».
4. «Puedo decir honestamente que esta es la primera relación en la que he estado donde estamos en igualdad de condiciones, construyendo el uno al otro. Con las parejas anteriores, me apegaba peligrosamente a las personas con las que salía simplemente por atracción y terminaba en muchas relaciones horribles. Pasaba mucho tiempo en estas relaciones preocupándome por mi propia apariencia. También me concentraba constantemente en cómo me veía en comparación con estas parejas, o si ellos pensaban que me veía lo suficientemente bien como para estar con ellos.
«No empecé a sentirme atraída por él y no diría que es convencionalmente atractivo»
«Toda la relación se basaba en la compatibilidad física, que sigo pensando que es importante, pero no de la misma manera que la valoraba antes. Desde luego, no me siento poco atraída por mi marido, sólo que no empecé atraída por él y no diría que es convencionalmente atractivo. Pero ese sentimiento de competencia no existe en esta relación. Me siento segura y apoyada por primera vez en mi vida. Nos hemos casado, hemos comprado una casa y vamos a tener un bebé juntos. Así que creo que hemos funcionado muy bien».
5. «Definitivamente no es mi chico ideal de fantasía, ni me sentí súper atraída por él de inmediato. Definitivamente tomó un tiempo – ¡casi cuatro meses! Pero es tan bueno para mí. No sólo es amable y atento y me hace sentir libre para ser yo misma, sino que estar cerca de él también me hace ser más amable con los demás. No es excitante ni espontáneo, pero es fiable y tiene los pies en la tierra. Nunca pensé que podría sentir un amor tan profundo por alguien así, ¡pero lo siento! No sé si durará, pero ahora mismo se siente muy bien».
6. «Fuimos mejores amigos durante un par de años antes de salir. Pensé que era de aspecto decente. Guapo. Por encima de la media. Pero no era como, ‘Oh Dios mío, tómame ahora’. Eventualmente me convenció de tener una cita con él. Era de lejos la persona más dulce que había conocido. Era la mejor persona. Siempre amable, considerado, divertido. Llevamos juntos casi cuatro años, comprometidos desde hace poco más de uno. Ahora es muy atractivo para mí. No puedo recordar un momento en el que no quisiera saltar inmediatamente sobre él».
7. «Pienso pasar toda mi vida con él. Empezamos como amigos, y él no es ni de lejos lo que yo solía pensar que era mi ‘tipo’. Me invitó a salir cuando nos conocimos, y lo rechacé (con la excusa de que ambos estamos en el primer año de la universidad, y no quiero una relación). Lo aceptó y entablamos una gran amistad. Era divertido, amable, cariñoso, sabía escuchar, era inteligente y, cuanto más lo conocía, más atractivo me resultaba físicamente, aunque en realidad no había cambiado nada de su aspecto. Nos convertimos en FWB durante un tiempo, hasta que ambos nos dimos cuenta de que queríamos ser exclusivos.
«Creo que aunque la atracción inicial no estaba ahí, ahora está al 100% después de conocerle. Soy partidaria de que la gente con una personalidad fea se verá más fea, y la gente con una personalidad hermosa se verá más hermosa.»
8. «Estoy comprometida con él y vamos a comprar una casa la semana que viene. Nos casaremos el mes que viene. Lo conocí en Tinder. No me atraía al 100%: tiene una cara muy bonita pero es más bajo y mucho más delgado de lo que me gustaría. Me costó un poco superarlo y decidirme por él por todas las demás razones increíbles por las que deberíamos estar juntos. Si soy sincera, todavía no es mi tipo de cuerpo ideal, pero es mi mejor amigo y es todo lo que aspiro a ser: inteligente, responsable, ambicioso, compasivo, amable, paciente, humilde, todo.»
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