Las familias sin hogar son el segmento de más rápido crecimiento de las personas sin hogar. En otras palabras, constituyen alrededor del 40% de la población sin hogar en una noche cualquiera.
También se ha estudiado que las mujeres sin hogar tienen casi cinco veces más probabilidades de quedarse embarazadas que las mujeres alojadas.
Dos generaciones están en riesgo cuando una mujer sin hogar se queda embarazada
A la mujer le quedan tres opciones; criar al niño, interrumpir el embarazo o darlo en adopción.
Las jóvenes son más propensas a los embarazos no planificados como resultado del rechazo de la pareja, la familia y los amigos. En segundo lugar, no tienen una fuente de ingresos estable ni educación para encontrar un trabajo.
Sin refugios seguros, hay un tremendo estrés físico y emocional en las mujeres embarazadas. Pone en peligro su salud y la de su hijo no nacido. Y lo que es más importante, puede costar hasta 233.610 dólares criar a un niño hasta los 18 años en Estados Unidos.
El embarazo suele ser no planificado y no deseado para la mayoría de las mujeres sin hogar
Para la gran mayoría de las mujeres sin hogar, el embarazo es no planificado y no deseado. En segundo lugar, el 30% de estas mujeres declararon haberse visto obligadas a mantener relaciones sexuales y a practicar «sexo de supervivencia» a cambio de comida, dinero, refugio o drogas.
Cuando las madres se ven obligadas a renunciar a un bebé, la mayoría experimenta un dolor crónico y no resuelto.
Si no tienes dónde quedarte
Puedes presentar una solicitud de ayuda a un ayuntamiento si no tienes hogar y estás embarazada. Por lo tanto, el Ayuntamiento es legalmente responsable de proporcionar un hogar temporal o un alojamiento permanente dependiendo de tu caso.
Si es probable que pierdas tu alojamiento en los próximos dos meses, tienes derecho a pedir ayuda al ayuntamiento.
¿Qué podemos hacer para ayudar a las mujeres embarazadas sin hogar?
La vida puede ser una serie de acontecimientos traumáticos cuando vives en la calle y esperas un hijo. Por encima de todo, estas mujeres están huyendo de parejas abusivas y lidiando con un embarazo no planeado.
Por otra parte, no tienen apoyo de la familia o los amigos.
Como los retos son únicos, hay diversas formas de ayudar a las mujeres sin hogar;
- Donar ropa de maternidad, vitaminas prenatales y otros medicamentos
Lo más importante es tener en cuenta que una mujer sin hogar está indefensa. Si tienes acceso a medicamentos para el embarazo o ropa de maternidad de repuesto, o ropa para recién nacidos, ofrécelos a las mujeres sin hogar.
- Ofrece tu tiempo, dinero o recursos a las organizaciones que trabajan en favor de las mujeres embarazadas sin hogar
Hay organismos gubernamentales, iglesias, ONG y organizaciones privadas que vigilan de cerca a las mujeres sin hogar. Si te ofreces como voluntario a través de tu tiempo, dinero u otros recursos, puedes ayudarlas.
- Patrocina la educación de sus hijos no nacidos
La falta de ingresos estables es el aspecto más difícil de la falta de hogar como madre soltera. Si puedes patrocinar la educación de sus hijos, una generación escaparía del círculo vicioso de la falta de hogar
- Reconocer y comprometerse
Sobre todo, la falta de hogar puede ser extremadamente aislante y deprimente para las mujeres. Debemos reconocerlas en la calle, compartir una sonrisa, escuchar sus historias e iniciar una conversación.
- Ayudarlas a encontrar un lugar donde vivir
La mayoría de las jóvenes madres desconocen sus derechos como ciudadanas. El Ayuntamiento es legalmente responsable de proporcionar un hogar temporal o un alojamiento permanente a las mujeres embarazadas.
En otras palabras, las mujeres embarazadas sin hogar son especialmente vulnerables a múltiples formas de victimización. Los refugios para mujeres son inseguros tanto para las embarazadas como para los recién nacidos. En consecuencia, han denunciado una violencia física y mental extrema dentro de los hogares seguros.
Sufren antes, durante y después del parto en múltiples entornos a manos de múltiples agresores.
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