Fibrilación auricular

¿Cuáles son los síntomas de la fibrilación auricular?

La fibrilación auricular puede no causar ningún síntoma o puede causar cualquiera de los siguientes:

  • Palpitaciones (conciencia de latidos rápidos del corazón)

  • Desmayos

  • Mareos

  • Fatiga

  • Debilidad

  • Falta de respiración

  • Angina pectoris (dolor en el pecho causado por una reducción del suministro de sangre al músculo cardíaco)

Algunas personas tienen fibrilación auricular entre períodos de latidos completamente normales (FA intermitente o paroxística). Otras tienen fibrilación auricular durante siete días o más (FA persistente).

¿Qué causa la fibrilación auricular?

Para muchas personas, la causa subyacente de la fibrilación auricular es más grave que la propia arritmia. Las principales causas son:

  • Edad: más común a partir de los 50 años

  • Género: más común en los hombres

  • Raza: más común en caucásicos

  • Enfermedad coronaria (enfermedad de las arterias coronarias)

  • Enfermedad cardíaca reumática (causada por fiebre reumática)

  • Hipertensión (presión arterial alta)

  • Diabetes

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  • Tirotoxicosis (exceso de hormonas tiroideas)

  • Obesidad

  • Apnea del sueño

Algunas otras arritmias – aleteo auricular y taquicardia auricular- pueden convertirse posteriormente en fibrilación auricular si no se tratan.

¿Cómo se diagnostica la fibrilación auricular?

Su médico puede sospechar que tiene fibrilación auricular basándose en su historial médico y sus síntomas. El médico comprobará su frecuencia y ritmo cardíacos, así como sus pulsaciones. En la fibrilación auricular, el pulso, que refleja la actividad de los ventrículos, suele no coincidir con los sonidos del corazón porque no todos los latidos auriculares llegan a los ventrículos.

El diagnóstico de fibrilación auricular suele confirmarse con un electrocardiograma (ECG o EKG). Sin embargo, dado que la fibrilación auricular tiende a aparecer y desaparecer, un ECG en la consulta puede ser normal. Si este es el caso, su médico puede darle un monitor de ECG para que lo lleve en casa, que registrará su ritmo cardíaco a lo largo del tiempo. Estos incluyen:

  • Monitor Holter – un ECG portátil que se lleva continuamente durante uno a siete días para registrar sus ritmos cardíacos a lo largo del tiempo

  • Monitor de eventos – un ECG portátil que se lleva durante uno o dos meses, que registra sólo cuando se activa por un ritmo cardíaco anormal o cuando usted lo activa manualmente

  • Monitor implantable – un diminuto monitor de eventos insertado bajo su piel, que se lleva durante varios años para registrar eventos que sólo tienen lugar en raras ocasiones.

¿Cómo se trata la fibrilación auricular?

Algunas personas con fibrilación auricular recuperan el ritmo normal sin tratamiento. De lo contrario, el primer objetivo del tratamiento es encontrar y tratar la causa subyacente. Si la causa es la tirotoxicosis, el tratamiento puede consistir en medicamentos o cirugía. En la mayoría de los pacientes no puede identificarse ninguna causa específica reversible.

Los médicos pueden abordar el tratamiento de la fibrilación auricular utilizando varias estrategias:

  • Medicamentos para reducir la frecuencia cardíaca, incluyendo las siguientes clases de medicamentos:

    • Bloqueantes beta

    • Bloqueantes de los canales de calcio

    • Digoxina, que ralentiza las corrientes eléctricas entre las cámaras superiores e inferiores

  • Medicamentos para controlar el ritmo cardíaco, llamados antiarrítmicos, como:

    • Flecainida

    • Propafenona

    • Dofetilida

    • .

      Dronedarona

    • Amiodarona

  • Medicamentos para prevenir los coágulos de sangre, llamados anticoagulantes o diluyentes de la sangre. El riesgo más importante de la fibrilación auricular es el desarrollo de un accidente cerebrovascular, que puede ser mortal. La fibrilación auricular multiplica por cinco el riesgo de ictus. Muchos pacientes con fibrilación auricular, especialmente los mayores de 65 años, necesitan anticoagulación de por vida para prevenir los accidentes cerebrovasculares y prolongar la vida.

  • La ablación con catéter, para tratar el desencadenante más común de la fibrilación auricular: las células de las venas pulmonares que producen su propia señal eléctrica. Este tipo de ablación crea un anillo de tejido cicatricial donde las venas entran en el corazón, bloqueando las señales eléctricas de las venas.

  • Procedimiento de cierre del apéndice auricular izquierdo, para pacientes que no pueden tomar anticoagulantes debido a los riesgos de hemorragia.

  • Procedimiento de laberinto, en el que se corta el músculo cardíaco en lugares estratégicos para crear un «laberinto» de tejido cicatricial que impide el paso de las señales eléctricas. Obtenga más información sobre el procedimiento de laberinto mínimamente invasivo en Johns Hopkins, también conocido como ablación por radiofrecuencia mínimamente invasiva.

  • La cardioversión, en la que se aplica una descarga eléctrica al corazón con cuidado mientras la persona está anestesiada. Aunque este procedimiento es eficaz para restablecer el ritmo sinusal normal, no evita que se repita la fibrilación auricular. Por lo tanto, suele combinarse con un tratamiento farmacológico antiarrítmico o con la ablación por catéter. Más información sobre la cardioversión en Johns Hopkins.

Aprenda más sobre las arritmias o visite el Servicio de Electrofisiología y Arritmias de Johns Hopkins.

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