La tos es uno de los síntomas más comunes de las infecciones del tracto respiratorio y es un problema frecuente que se encuentra en la práctica general así como en la práctica hospitalaria. Una amplia gama de procesos patológicos puede presentarse con tos y el tratamiento definitivo depende de la identificación de la causa y el diagnóstico. El tratamiento específico de la causa debería controlar la tos, pero esto puede no ocurrir en todos los casos y en una proporción considerable de pacientes no se puede encontrar ninguna causa asociada. Puede observarse una mayor sensibilidad del reflejo de la tos en los pacientes con tos seca. El alivio sintomático debe considerarse cuando la tos interfiere con las actividades diarias del paciente y se trata eficazmente con preparados antitusivos que están disponibles como combinaciones de codeína o dextrometorfano con antihistamínicos, descongestionantes y expectorantes Los antitusivos se utilizan para el alivio sintomático eficaz de la tos seca o no productiva. Los antihistamínicos de primera generación, como la clorfeniramina, y los derivados opiáceos de acción central, como la codeína, suelen utilizarse solos o combinados en el tratamiento de la tos inespecífica. La sedación que provocan es valiosa, sobre todo si la tos perturba el sueño. Aunque existen muchos datos experimentales sobre combinaciones de antitusígenos y antitusígenos con un solo agente, hay una gran escasez de publicaciones sobre estas combinaciones en la tos inespecífica. El tratamiento de la tos seca sigue siendo un reto en algunos pacientes y en este artículo se revisa el alcance de los fármacos actuales y la combinación de codeína y clorfeniramina en el tratamiento eficaz de la tos seca.
Arquidia Mantina
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