eval(ez_write_tag([[728,90],’catbeep_com-box-2′,’ezslot_11′,120,’0′,’0′]);¿Pueden los gatos comer verduras?

Como propietario de un gato, quiere mantener a su mascota lo más sana posible, y una de las mejores formas de hacerlo es mediante una buena nutrición. Sin embargo, muchas personas desconocen qué alimentos pueden y no pueden dar a su gato, aparte de la comida convencional para gatos. En particular, muchos propietarios no están seguros del papel que pueden desempeñar las verduras en la dieta de un gato.

¿Pueden los gatos comer verduras? La respuesta corta es «sí», aunque hay algunas advertencias importantes. Aunque es perfectamente seguro dar a su gato zanahorias cocidas o brócoli al vapor, es esencial que evite dar a su gato ciertas verduras, como la cebolla o el ajo, ya que son tóxicas.

También es importante subrayar que los gatos nunca deben ser alimentados con una dieta exclusivamente vegetal y deben obtener la mayor parte de su nutrición de fuentes basadas en la carne. Sin embargo, las verduras pueden formar parte de una dieta equilibrada para su gato y pueden ser una excelente alternativa a los premios más calóricos. Como trataré un poco más adelante, las verduras también pueden ofrecer algunos beneficios para la salud de los gatos, siempre que se consuman en cantidades adecuadas.

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¿Pueden los gatos comer verduras?

El tema de la alimentación de los gatos con verduras es sorprendentemente controvertido, y la mayor parte de esta controversia se basa en un hecho clave. Los gatos están clasificados como carnívoros obligados, en lugar de ser omnívoros como nosotros. Esto significa que necesitan proteínas animales procedentes de la carne para sobrevivir y, a diferencia de nosotros, no necesitan frutas ni verduras. De hecho, toda la nutrición esencial para un gato puede obtenerse a partir de alimentos de alta calidad a base de carne.

Para algunas personas, esto lo convierte en un caso abierto y cerrado: los gatos no necesitan verduras, por lo tanto no hay que alimentarlos con verduras. Sin embargo, el hecho de que los gatos sean carnívoros obligados no significa que no puedan comer verduras. Es más, aunque las verduras no son una parte esencial de la dieta de un gato y éste no puede mantenerse sólo con ellas, pueden aportar algunos beneficios nutricionales y gastrointestinales interesantes.

En general, los gatos pueden comer la mayoría de las verduras y están perfectamente bien como parte de una dieta equilibrada. A pesar de no ser esenciales, muchas verduras contienen elementos como magnesio, potasio, fibra, vitaminas y antioxidantes, que pueden ser útiles para el organismo de los gatos, ya que ayudan a reforzar su sistema inmunitario y facilitan la digestión.

La otra cara de la moneda es que los gatos carecen de las enzimas necesarias para descomponer las verduras en grandes cantidades, y las verduras también contienen carbohidratos, que los gatos no necesitan en cantidades similares a las nuestras. De hecho, sobrecargar a los gatos con carbohidratos es una de las principales causas de la creciente epidemia de obesidad felina. Por lo tanto, aunque los gatos pueden comer verduras con seguridad, es importante que se les den con moderación.

Un área en la que las verduras pueden desempeñar un valioso papel es cuando su gato sigue una dieta de pérdida de peso. En este caso, las verduras pueden servir como alternativa baja en calorías a las golosinas que normalmente le daría a su gato, ayudando en el proceso de pérdida de peso. Personalmente, recomendaría utilizar las verduras como algo más que una golosina ocasional, independientemente de si el objetivo es la pérdida de peso, ya que esto ayudará a evitar problemas de sobrealimentación.

En este punto, también es esencial señalar que las verduras son un grupo de alimentos extremadamente diverso y, aunque pueden desempeñar un papel en una dieta felina, hay ciertas verduras que no son adecuadas para los gatos. Por lo general, esto se debe a que contienen sustancias tóxicas o perjudiciales para los gatos, como trataré con más detalle más adelante.

Si tiene alguna duda sobre si una verdura concreta es segura o no, absténgase de dársela a su gato hasta que se lo aclare. Recuerde que los gatos no necesitan las verduras en absoluto, por lo que sólo serán un aspecto complementario de la dieta de su gato. Debería hablar con un veterinario si no está seguro de la idoneidad de una verdura.

Así que, para concluir, los gatos no necesitan realmente verduras en su dieta, pero son capaces de comer con seguridad la mayoría de ellas. En pequeñas dosis, las verduras pueden ser valiosas para su gato, pero no deberían formar una parte importante de su dieta.

¿Qué verduras son buenas para los gatos?

Ahora que hemos establecido que los gatos pueden comer verduras, es probable que su primera pregunta sea: ¿qué verduras pueden comer? Con el gran número de verduras que existen, es casi imposible crear una lista completa de opciones aceptables. En su lugar, es más útil observar qué verduras pueden ofrecer a su gato y luego identificar las que son seguras y beneficiosas de alguna manera.

Por ejemplo, el brócoli es una opción sólida, porque es seguro de comer, relativamente fácil de preparar y contiene antioxidantes beneficiosos. Además, se puede dar fácilmente como un alimento independiente o como parte de una comida. Asimismo, las zanahorias son una buena fuente de vitaminas y minerales. Técnicamente, pueden darse a su gato tanto cocidas como crudas, pero es preferible cocinarlas primero porque las zanahorias crudas más duras pueden considerarse un peligro de asfixia.

Muchos otros vegetales verdes son perfectamente seguros para que su gato los coma y pueden desempeñar un papel en una dieta saludable, con algunos ejemplos obvios como los guisantes, las judías verdes, el pepino y la lechuga. De todas ellas, las judías verdes pueden ser las más beneficiosas, ya que son una fuente de fibra y pueden ayudar a regular el sistema digestivo de su gato.

Las espinacas también se recomiendan a veces a los propietarios de gatos que desean alimentarlos con verduras. Además de aportar vitaminas y minerales, puede tener un efecto antiinflamatorio en los felinos. Sin embargo, es especialmente importante que las espinacas se den sólo en pequeñas cantidades, ya que contienen olaxato de calcio. En pequeñas dosis, es inofensivo, pero en grandes cantidades, puede contribuir a graves problemas del tracto urinario.

Verduras que los gatos deben evitar

Aunque en general se considera seguro alimentar a su gato con la mayoría de las verduras -siempre que se preparen adecuadamente-, algunas verduras deben evitarse por completo, ya sea porque son peligrosas para los gatos o porque éstos tienen dificultades para digerirlas. Algunas de las verduras que deben evitarse son

  • Cebollas
  • Ajo
  • Setas
  • Tomates*
  • Abolladillas
  • Avocados

Las cebollas son tóxicas porque contienen tiosulfato, que tiene el potencial de dañar o incluso reventar los glóbulos rojos del gato. Esta verdura es tóxica en todas sus formas, independientemente de que esté entera o picada, cruda o cocinada, y el polvo de cebolla puede ser incluso más perjudicial. La cebolla puede causar una reacción desagradable, incluso en pequeñas dosis, mientras que cantidades suficientemente grandes de cebolla pueden ser realmente mortales para algunos gatos.

El ajo, el cebollino y el puerro también producen efectos muy similares a los de la cebolla, y se ha descubierto que el ajo es varias veces más potente. Vale la pena señalar que con todas estas verduras, la aparición de los síntomas tiende a ser gradual. Hay algunos signos tempranos a los que hay que prestar atención, que podrían indicar un nivel tóxico en el organismo de su gato, y que incluyen vómitos, diarrea, fatiga e irritación general de la boca.

*Es posible que sienta curiosidad por los tomates, por dos razones principales. En primer lugar, porque son un ingrediente de muchos alimentos para gatos, y en segundo lugar porque hay mucha información contradictoria en Internet sobre su estado. La explicación sencilla es que los tomates maduros, por sí solos, no son peligrosos para los gatos. Sin embargo, las hojas, los tallos y otras partes de la planta del tomate son tóxicos, y un tomate que aún no está maduro puede causar problemas gastrointestinales.

Cómo conseguir el equilibrio dietético adecuado

A estas alturas, es posible que también te preguntes cómo conseguir el equilibrio dietético adecuado para tu gato, de modo que evites sobrealimentarlo con verduras y te asegures de que recibe toda la nutrición que necesita. Lo primero que debe hacer es invertir en comida para gatos de alta calidad, que debería constituir la mayor parte de la ingesta de alimentos de su gato. El primer ingrediente de la lista debe ser la carne, y el alimento no debe contener más de un cinco por ciento de carbohidratos.

Algunos expertos en nutrición dicen que hay que procurar proporcionar al menos el 90 por ciento de la ingesta calórica diaria recomendada para su gato a través de la comida de alta calidad para gatos, con no más del 10 por ciento procedente de golosinas, y estas golosinas incluirían verduras. Esta es una buena regla general que hay que seguir, ya que garantiza que su gato recibirá los nutrientes esenciales de su comida, a la vez que le ofrece un cierto margen para la experimentación.

También cabe destacar que no es necesario que proporcione verduras a su gato todos los días, y que suelen ser más beneficiosas cuando se le dan como máximo un par de veces a la semana. Aunque las verduras se consideran muy saludables para nosotros, si se sobrepasa el 10 por ciento de la ingesta diaria de calorías de su gato, se corre el riesgo de que surjan problemas relacionados con la sobrecarga de carbohidratos. Por esta razón, es mejor adoptar un enfoque de «menos es más».

Por último, debe comprobar cuidadosamente los ingredientes del alimento principal para gatos que está utilizando, ya que puede contener algunas verduras. Estos ingredientes deben tenerse en cuenta en el cálculo del 90 por ciento / 10 por ciento.

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