Abraham Lincoln fue una personalidad importante en la historia de los Estados Unidos, así como el decimosexto presidente del país, conocido principalmente por abolir la esclavitud y gestionar el país en los momentos más duros de su historia, la Guerra Civil. Nacido en 1809 en Kentucky en el seno de una familia muy pobre, Lincoln creció en Indiana, junto a sus dos hermanos. Debido a la pobreza de la familia y a la temprana pérdida de la madre de los hijos, Abraham fue principalmente autodidacta. En la década de 1830 comenzó su carrera como abogado y activista social promoviendo las ideas de los efectos negativos de la esclavitud en el desarrollo de la sociedad. Lincoln tuvo mucho éxito en la política y la influencia social, por lo que se convirtió en líder del Partido Whig y en la década de 1940 fue nombrado miembro del Congreso de Illinois. En la década de 1850 se convirtió en el número uno del Partido Republicano y en 1860 fue elegido decimosexto presidente de los Estados Unidos de América.
Como presidente, Lincoln emprendió medidas estrictas para controlar a los políticos que apoyaban la esclavitud y ultimó los procedimientos para abolirla en 1865. Promovió las ideas de nacionalismo, unidad, democracia, libertad e igualdad de derechos de todas las personas. En los tiempos de la Guerra Civil Americana, Lincoln trató de mantener el país en una condición social y económica adecuada, así como aprovechó la situación para promover las ideas de abolición de la esclavitud. En 1865 inició y dirigió su campaña de reelección, pero en abril de 1865 fue asesinado por un actor, John Booth, a la edad de 56 años. Abraham Lincoln está muy bien considerado por muchos historiadores como un líder eficaz y se le considera uno de los presidentes más influyentes de los Estados Unidos.