¡Utilizando tecnología de hiperrealismo inmersivo!
La primera vez que la gente se fijó en Alt-J fue cuando su vídeo para el single Something Good causó un gran revuelo en Internet. Un brillante retrato a cámara lenta de una corrida de toros se ajustaba perfectamente al indie rock con influencias del trip-hop de la banda. Desde entonces, no hay quien pare al cuarteto, que se conoció en la Universidad de Leeds en 2007. Su disco de debut, An Awesome Wave, ganó el prestigioso Mercury Music Prize de Gran Bretaña en 2012 y, espoleados por el éxito de singles como Breezeblocks y Matilda, inspirado en León, llegaron a vender más de un millón de copias en todo el mundo.
El guitarrista Gwil Sainsbury abandonó el grupo en 2014, pero los tres miembros restantes se comprometieron a mantenerlo unido. Su sonido es una mezcla ecléctica de influencias, desde el folk y el indie rock hasta el pop y el trip-hop. Su tercer álbum, Relaxer, salió en junio de 2017 y en él el trío vuelve a salir a la carretera, pero esta vez la banda utilizará la tecnología de hiperrealismo inmersivo, para envolver a toda su audiencia en un increíble sonido envolvente para una experiencia realmente única.