Una buena bruma facial es ideal para usarla sobre la marcha, ya sea para un rápido estímulo de camino a la oficina, un chorro de agua después de una reunión estresante o un refrescante soplo de aire fresco después de un atestado viaje en tren. Aunque huelen bien y son divertidos de usar, en realidad tienen verdaderos beneficios para el cuidado de la piel para todos los tipos de piel. Además de aportar una dosis de hidratación, las brumas faciales pueden dejar la piel más brillante y luminosa. La producción de sebo -que se mezcla con las bacterias para formar el acné- aumenta cuando sube la temperatura de la piel. Por eso, cuando la cara se calienta, puede aumentar la grasa y, por tanto, los brotes. Aquí es donde entran en juego las brumas faciales: refrescan la piel al contacto y la hidratan desde fuera hacia dentro. La barrera protectora se debilita cuando la piel está deshidratada, lo que conduce a una más rápida descomposición del colágeno y la elastina. Por eso, un rostro hidratado parece más terso, con menos signos visibles de líneas de expresión y arrugas.
La mayoría de las brumas faciales están formuladas específicamente para ayudar a ciertos problemas de la piel. Por ejemplo, si tienes la piel seca, busca una bruma que contenga ingredientes humectantes como el ácido hialurónico, la glicerina o el escualeno, ya que potencian la hidratación y rellenan las células de la piel casi inmediatamente. Para quienes tienen una piel más grasa, las brumas florales y a base de aloe pueden ser eficaces para reducir la inflamación y calmar los granos, mientras que los astringentes como la lima pueden ayudar a purificar la piel al contacto. Incluso las personas con piel normal pueden beneficiarse de ellas: las brumas anticontaminación y antioxidantes pueden ser un paso útil para el cuidado de la piel, especialmente cuando no se tiene tiempo para una rutina sistemática de varios pasos por la mañana. Algunas brumas faciales también tienen la capacidad de extender el maquillaje (las que tienen glicerina y escualeno en la lista de ingredientes pueden servir de imprimación) o están reforzadas con FPS, lo que las convierte en productos multiuso que puedes utilizar sin estropear tu base.
Sin embargo, los productos para el cuidado de la piel pueden ser caros, y una bruma facial puede parecer un paso superfluo si estás acostumbrada a una simple rutina de limpieza, tonificación e hidratación. Esta edición de brumas faciales refrescantes y tonificantes cuesta menos de 1.000 rupias, por lo que te garantizamos que obtendrás más por tu dinero.
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